En este último reto, nos enfocamos en el uso de las redes sociales y las herramientas que podemos elegir atendiendo a su función educativa dentro del aprendizaje microlearning.
En esta ocasión, he elegido realizar un caso práctico que considero de gran utilidad por sus beneficios, tanto educativos como profesionales.
Es un caso que conozco de cerca, pues tuve la oportunidad de trabajar esta actividad en clase de ELE en el centro de aprendizaje de lenguas EF Barcelona.
La experiencia estuvo plagada de muchos matices y aspectos, la mayoría, sin duda, positivos. Mi idea inicial era desarrollar con ellos el trabajo cooperativo, que se enfrentaran a realizar algo que van a aplicar en la vida real en muy poco tiempo y del que, sin duda, van a sacar provecho en muchas otras ocasiones.
Descubrí cómo mis alumnos eran capaces de superar sus miedos y temores a hablar en público, que son muchos más si cabe en una lengua extranjera. Al mismo tiempo que buscaban la mejor manera de hacer la actividad, se hacían preguntas, aprendían a organizar ideas, nuevo vocabulario, conocerse mejor y, finalmente, a sentirse más seguros de si mismos. El modelo que elegimos para hacer la actividad, puedes consultarlo aquí